ST. JOSEPH PRO-CATHEDRAL
From Scripture we learn that the Apostles appointed others by an external rite (imposition of hands), conferring inward grace. The fact that grace is ascribed immediately to the external rite, shows that Christ must have thus ordained.
With regard to the episcopate the Council of Trent defines that bishops belong to the divinely instituted hierarchy, that they are superior to priests, and that they have the power of confirming and ordaining which is proper to them.
The first effect of the sacrament is an increase of sanctifying grace. With this, there is the sacramental grace which makes the recipient a fit and holy minister in the discharge of his office.
As the duties of God’s ministers are manifold and onerous, it is in perfect accord with the rulings of God’s Providence to confer a special grace on His ministers.
De la Escritura aprendemos que los Apóstoles nombraron a otros por un rito externo (imposición de manos), confiriendo una gracia interna. El hecho de que la gracia se atribuya inmediatamente al rito externo, muestra que Cristo debe haber ordenado así.
En cuanto al episcopado, el Concilio de Trento define que los obispos pertenecen a la jerarquía divinamente instituida, que son superiores a los sacerdotes y que tienen el poder de confirmar y ordenar que les corresponde.
El primer efecto del sacramento es un aumento de la gracia santificante. Con esto, hay una gracia sacramental que hace al receptor un ministro apto y santo en el desempeño de su oficio.
Como los deberes de los ministros de Dios son múltiples y onerosos, está en perfecta concordancia con los dictámenes de la Providencia de Dios conferir una gracia especial a sus ministros.